'Volver con la frente marchita', así regresamos en septiembre. Tenía ganas de comenzar la rutina, sí, a pesar de que necesitaba disfrutar de unas nuevas vacaciones... paradojas de la vida.
En este mes de propósitos, de listas y de proyectos, contaros que ¡¡¡no he hecho ni uno!!! Eso sí: he desempolvado la máquina de coser que me trajeron los Reyes, dijimos adiós a la temporada piscinera robando al sol sus últimos minutos de calor, me reencontré con mi guitarra y nos volvimos a enamorar, malcomí y eché horas en un hospital del que por poco salgo con claustrofobia, disfruté viendo a Enma jugar y cómo Oscar le acompaña siempre que puede, me encantó la delicadeza de Kiva Magazine y el buen saber hacer del equipo que hay detrás, vivimos la rentrée con nervios y me planteé las cuestiones de siempre por estas fechas, con el poso amargo como guinda final de una conciliación familiar-laboral imposible...
También dimos la bienvenida al otoño, mi estación favorita. Un año más, como árbol caduco, dejaré expuestas mis ramas esperando que la primavera venga a cubrirme con sus flores. Porque esta primavera las flores serán aún más bellas.
Y tu septiembre, ¿ha sido soleado?
Y tu septiembre, ¿ha sido soleado?
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